Al capturar una imagen, no solo obtienes la fotografía en sí, sino que el archivo también contiene información adicional. Entre esta información se incluye el dispositivo utilizado, la fecha de la toma, la ubicación exacta (gracias al GPS) y otros datos relevantes. Esto puede ser útil, pues podrías recordar en el futuro dónde tomaste esa foto. Sin embargo, también podría poner en riesgo tu privacidad. A continuación, te explicaremos cómo eliminar los metadatos de tus imágenes.
Eliminar metadatos es un proceso sencillo que puedes realizar desde Windows. También existen aplicaciones específicas para móviles, abarcando diferentes sistemas operativos. El procedimiento es rápido, lo que te permite compartir o almacenar imágenes sin preocuparte por los metadatos que puedan incluir.
Eliminar metadatos de una imagen en Windows
Imagina que has viajado a otro país, visitando numerosos monumentos y lugares de interés, y tomaste muchas fotos. Si revisas esas imágenes en años posteriores, tal vez no recuerdes con exactitud la ubicación de ese templo budista en Tailandia o ese hermoso lago en Suiza. Sin embargo, gracias a los metadatos, puedes recuperar la posición GPS.
Cuando envías una foto a otra persona, los metadatos continúan en el archivo. Puede que no desees que sepan exactamente dónde tomaste esa imagen, qué dispositivo utilizaste o cualquier otro dato. Solo quieres compartir la foto. Por eso, eliminar los datos de una imagen es un proceso fácil en Windows.
Para borrar esos metadatos, solo tienes que hacer clic derecho sobre la foto, seleccionar Propiedades, ir a Detalles y, en la parte inferior, hacer clic en Quitar propiedades e información personal.
Se abrirá una nueva ventana donde podrás elegir entre crear una copia sin ninguna de las propiedades o quitar propiedades específicas de este archivo. Selecciona la segunda opción y elige cuáles deseas eliminar. Puedes seleccionar cada opción individualmente o hacer clic en Seleccionar todo y luego en Aceptar.
Una vez completado este proceso, notarás que la información ya no está disponible. Por ejemplo, si decidiste eliminar los datos GPS, la información de ubicación de la foto ya no estará visible. Al compartir una imagen, evitarás proporcionar datos que prefieras mantener en privado.
Proteger tu privacidad está en tus manos
Recuerda que eliminar los metadatos de las fotos es solo un pequeño paso hacia una mayor privacidad en línea. Existen muchas otras medidas que pueden ayudarte a mantener el anonimato en la red. Es fundamental reducir tu exposición en redes sociales. Si usas plataformas como Facebook o Instagram, ten cuidado con lo que decides compartir.
En el caso de las redes sociales, puedes optar por no revelar información específica como la ubicación de una foto que subes. Esto es independiente de los metadatos y es una práctica común en algunas plataformas como Instagram.
También es esencial que revises la información que proporcionas al registrarte en un sitio web. Hay numerosos sitios fraudulentos diseñados únicamente para obtener datos personales, que luego pueden ser utilizados en ataques cibernéticos como el Phishing. Cuanto menos expongas, mejor será. Puedes utilizar identidades digitales, correos alternativos y otras medidas de protección.
Por lo tanto, para mejorar tu privacidad, considera eliminar los metadatos de tus fotografías. Esto te ayudará a reducir la información que acompaña cualquier imagen que compartas. Asimismo, es crucial que tengas cuidado con tus interacciones en redes sociales y en otras plataformas.
