A lo largo de los años, se han difundido numerosos mitos sobre Linux. Que si es exclusivo para programadores, que no es adecuado para jugar o que es imposible de manejar sin la terminal. Curiosamente, muchas de estas creencias provienen de personas que ni siquiera han experimentado con una distribución moderna. En este artículo, me propongo desmentir algunos de los mitos más comunes sobre Linux. Si alguna vez te ha despertado la curiosidad pero te has echado atrás por lo que has escuchado, sigue leyendo. Te sorprenderá todo lo que este sistema operativo puede ofrecer.
Linux es solo para expertos
Este es uno de los mitos más antiguos. Que si necesitas ser programador, que si todo se maneja a través de comandos, que si hay que compilar algo. Sin embargo, la realidad actual difiere enormemente de la de hace dos décadas.
Distribuciones como Ubuntu, Linux Mint o Zorin OS están diseñadas precisamente para lo contrario: para facilitarte la vida desde el primer momento. Su instalación se realiza con un par de clics, y una vez que accedes, todo funciona en un entorno gráfico. Navegar, ver vídeos, instalar software… Es tan sencillo como en Windows o macOS.
¿Existe una terminal? Por supuesto. Pero no es obligatoria en absoluto. De hecho, puedes pasar semanas sin abrirla si lo prefieres. Y si alguna vez te animas, comprobarás que aprender algunos comandos básicos no es tan difícil. Me ha salvado en más de una ocasión.
Linux no es para jugar
Otro mito que ya no tiene fundamento. Hubo un tiempo en que esto era cierto, pero desde que Valve presentó Proton para Steam, la situación ha cambiado radicalmente.
Hoy en día puedes jugar a títulos como Cyberpunk 2077, The Witcher 3, Elden Ring o GTA V en Linux sin inconvenientes. Steam ejecuta estos juegos directamente gracias a Proton, sin necesidad de que tú hagas nada complicado. Yo mismo tengo una biblioteca con más de 100 juegos y casi todos funcionan a la perfección.
¿Y si usas Steam Deck? Entonces ya estás jugando en un sistema Linux sin darte cuenta. Porque sí, SteamOS se basa en Arch Linux, y funciona maravillosamente. Además, si prefieres los juegos independientes o retro, Linux es un verdadero paraíso: emuladores, retroarch, configuraciones ligeras…
Linux carece de software útil
Este también es un mito. No encontrarás Photoshop o Microsoft Office, pero sí tienes muchas alternativas gratuitas y potentes.
Para escribir, puedes utilizar LibreOffice o OnlyOffice. Para edición de imágenes, GIMP. Para edición de vídeo, Kdenlive o DaVinci Resolve. Y para navegar, tienes a tu disposición Chrome, Firefox o incluso Edge. Todo se instala desde su tienda de aplicaciones, igual que en un dispositivo móvil.
Y si necesitas algún programa específico de Windows, puedes usar Wine o crear una máquina virtual. Es más sencillo de lo que parece y muchas veces puede sacarte de apuros.
Linux es inseguro
Esto lo suelen afirmar quienes nunca lo han probado. Sin embargo, la verdad es que Linux es uno de los sistemas más seguros que puedes tener en tu ordenador.
No porque tenga alguna característica mágica, sino porque está bien diseñado desde su núcleo. No puedes instalar software sin permisos. Todo está aislado. Hay actualizaciones frecuentes. Y al ser de código abierto, los fallos se detectan y corrigen rápidamente.
Por supuesto, no es infalible. Pero si utilizas el ordenador de manera convencional, tienes muchas menos probabilidades de contagiarte que en Windows.
Linux es complicado de instalar
Otro mito más. Instalar Ubuntu, por ejemplo, es tan simple como instalar Windows. Descargas la imagen, la grabas en un USB con una herramienta como Rufus, reinicias y sigues los pasos que te indica el instalador.
Si lo deseas, puedes instalarlo junto a Windows en modo de arranque dual, sin perder nada. El instalador te guía en cada paso. No es necesario ser un técnico ni manipular particiones complicadas.
No se puede usar Linux a diario
Yo lo utilizo todos los días. Y al igual que yo, miles de personas. Es rápido, estable, y no te inunda con publicidad ni actualizaciones inesperadas. Sirve para programar, navegar, escribir, jugar… e incluso para montar un servidor si es de tu interés.
Lo mejor es que puedes probarlo sin necesidad de borrar nada, desde un USB en modo “live”. Así puedes comprobar si te gusta. No tienes nada que perder y mucho que ganar.