Es posible que te des cuenta de que el Wi-Fi de tu dispositivo móvil presenta fallos en ciertos momentos. Esto suele ocurrir al trasladarte de una habitación a otra o al estar en lugares específicos de tu hogar. En este artículo, te ofreceremos algunas sugerencias que puedes implementar para evitar desconexiones. A menudo, con realizar pequeños ajustes podrás notar una mejora considerable.
Recuerda que, para conseguir una conexión inalámbrica óptima en tu móvil, intervienen varias variables. Es fundamental que el router esté en buen estado, que el receptor Wi-Fi de tu teléfono funcione correctamente, que no haya interferencias y la distancia entre el dispositivo y el router. Hay aspectos que puedes controlar, pero otros no tanto.
Cómo evitar que el Wi-Fi de tu móvil se vuelva inestable
El problema se presenta principalmente cuando notamos que la conexión es inestable. Podrías estar conectado en una habitación sin inconvenientes, disfrutando de Netflix o YouTube sin interrupciones, pero al trasladarte a otra área la situación cambia. La serie o película en streaming comienza a tener cortes, la calidad se reduce y es evidente que hay un inconveniente con la conexión.
Conéctate a la frecuencia correcta
Lo primero que debes verificar es que estés utilizando la frecuencia adecuada. Por lo general, los móviles pueden conectarse a la doble banda. Esto significa que puedes optar por los 2,4 GHz o los 5 GHz. Cada opción tiene sus ventajas y desventajas: la primera es ideal para conexiones a mayor distancia, aunque la velocidad puede verse afectada. La segunda, en cambio, es más estable y menos susceptible a interferencias, aunque su alcance es menor.
Si te mueves por diferentes áreas de tu hogar y te alejas del router, lo más recomendable es usar los 2,4 GHz, ya que ofrecen mayor alcance. Sin embargo, si enfrentas problemas en un lugar específico, podría ser debido a interferencias. En este caso, lo mejor es conectarte a los 5 GHz, que, gracias a un mayor ancho de canal, es menos sensible a interferencias de otros dispositivos que operan en la frecuencia de 2,4 GHz, como algunos teléfonos inalámbricos o dispositivos Bluetooth.
Verifica obstáculos que puedan interferir
También es importante que revises si hay algún obstáculo que esté afectando la señal. Ten cuidado, ya que un simple objeto metálico, como un marco en la pared, puede impactar bastante en la señal inalámbrica. Grandes paredes, electrodomésticos con agua (como lavadoras o lavavajillas) también pueden comprometer el rendimiento.
A veces, basta con reubicar aquello que podría estar interfiriendo. Si tienes un espejo al lado de la mesa donde usas tu móvil, intenta moverlo a otro lugar. Si hay algún adorno metálico que podría afectar, cámbialo de sitio.
Recuerda que incluso pequeños adornos cerca del router pueden influir. Por ejemplo, objetos metálicos o una pecera con agua. Cualquier elemento que no sea adecuado para la red Wi-Fi puede debilitar la señal y causar problemas.
Cambia la ubicación del router
Otra recomendación es asegurarte de colocar correctamente el router. Ubícalo en una zona central de la casa o, si no es posible, cerca de donde vayas a conectarte. Esto permitirá que la señal llegue con más potencia y tendrás menos inconvenientes al usar tu móvil, navegar por Internet, utilizar redes sociales o ver contenido en streaming.
Revisa lo que tienes cerca del router. Evita dispositivos que puedan causar interferencias, objetos metálicos y similares. Todo esto contribuirá a lograr una conexión más estable.
Es fundamental que el router esté en una ubicación que puedas aprovechar al máximo. Puede que esta no sea siempre la misma, así que considera cambiar la ubicación según tus necesidades. Por ejemplo, en verano podrías trabajar más en una habitación con tu ordenador, mientras que en invierno podrías preferir otra área.
Amplía la cobertura inalámbrica
Si lo anterior no ha mejorado tu conexión, siempre puedes considerar la opción de instalar un repetidor o un sistema Mesh. Esto potenciará la señal y te proporcionará cobertura en áreas donde antes no tenías o era muy débil. Asegúrate de utilizar dispositivos de calidad que sean compatibles con Wi-Fi o Wi-Fi 7 y que realmente sean útiles.
Para una zona específica, un repetidor puede ser una buena solución. Sin embargo, si deseas cobertura en toda la casa o en áreas más distantes, lo mejor es optar por un sistema Mesh. Este tipo de sistemas incluye varios satélites que se conectan entre sí y permiten conectar diferentes dispositivos.
En resumen, si enfrentas problemas con el Wi-Fi en tu móvil en casa, prueba los consejos que hemos mencionado y verás cómo disminuyen los inconvenientes. No olvides considerar las limitaciones que pueda tener tu propio dispositivo.
Preguntas frecuentes
¿Qué sucede si activo el Wi-Fi y los datos móviles simultáneamente?
El móvil intentará conectarse a la red Wi-Fi y, si no hay una red disponible, utilizará los datos móviles.
¿Mi móvil se conecta automáticamente a la red más rápida?
No necesariamente. Tu móvil podría conectarse a la red más cercana o con mayor señal, pero eso no implica que sea la más rápida. Podría ser un repetidor con velocidad limitada.
¿Puedo conectar mi móvil antiguo a mi nuevo router con Wi-Fi 7?
Sí, puedes conectarlo, ya que los routers Wi-Fi 7 son retrocompatibles, pero no aprovecharías las ventajas del nuevo protocolo, utilizando solo lo que sea compatible con tu teléfono.
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