En la actualidad, compartir archivos en línea es un proceso bastante fácil gracias a múltiples opciones disponibles. Utilizar la nube para subir y compartir documentos directamente es una práctica común, ofreciendo una alternativa a las unidades de almacenamiento físico como discos duros o pendrives. Sin embargo, al considerar el envío de archivos de gran tamaño, surge la pregunta: ¿Cuál es la opción más segura? Este artículo aborda los riesgos asociados con cada método.
Imagina que necesitas enviar a un amigo o familiar una carpeta con fotos y videos de un viaje, que puede ser bastante voluminosa, posiblemente ocupando varios GB. Es crucial que este contenido no quede expuesto o se pierda debido a fallos en los dispositivos.
Riesgos de la nube
Al usar la nube para subir archivos grandes, uno de los problemas principales es el tipo de cifrado. Algunas plataformas no emplean un cifrado robusto, dejando los archivos vulnerables. Además, al optar por servicios gratuitos, a menudo se recurre a plataformas menos seguras, incrementando los riesgos.
Existe también el riesgo de intrusión en tu cuenta, como puede ocurrir en servicios populares como Google Drive o Dropbox. Si alguien descubre tu contraseña, podría acceder y manipular tus archivos. Es esencial utilizar contraseñas seguras y activar la autenticación de dos factores.
Otro peligro es que el servicio se interrumpa, ya sea temporal o permanentemente, lo que te dejaría sin acceso a los archivos compartidos.
Problemas con unidades físicas
El uso de unidades físicas no está exento de riesgos. El peligro de pérdida es significativo; un pendrive puede extraviarse o caer en manos equivocadas. Además, existe el riesgo de que se introduzca malware al conectar la unidad a otros equipos, comprometiendo tanto la seguridad del dispositivo como la integridad de los archivos almacenados.
Adicionalmente, estas unidades pueden fallar, resultando en archivos corruptos que no podrán leerse en otros dispositivos. Aunque no es común a corto plazo, es un riesgo permanente que debe considerarse al compartir archivos importantes.
En resumen, si necesitas compartir archivos grandes, tanto la nube como las unidades físicas son opciones viables, cada una con sus propios riesgos. Es crucial evaluar cuál método se ajusta mejor a tus necesidades. Siempre tienes la opción de transferir archivos entre cuentas de Drive si es necesario.