Una aplicación que ya no usas podría seguir teniendo acceso a tus datos de Google: evítalo

El propósito es informarte sobre los riesgos y mostrarte cómo evitar que aplicaciones que ya no utilizas sigan teniendo acceso a tu información de Google. Esto ayudará a mejorar tu privacidad y a minimizar la exposición en la web, que podría ser utilizada en tu contra.

Aplicaciones con permisos de Google

Estamos hablando de aplicaciones de terceros a las que les diste permiso para acceder a tus datos de Google en algún momento. Esto es común al instalar ciertos programas o al utilizar servicios en línea. También puede resultar conveniente, ya que permite evitar el registro en esa plataforma al usar tu cuenta de Google para verificar tu identidad.

El inconveniente es que, en muchos casos, estas aplicaciones o servicios solo se utilizan de forma ocasional, ya sea una vez o por un corto período. Muchas veces, olvidamos revocar esos permisos y continúan vigentes indefinidamente. Esto podría permitir que accedan a nuestra información y la utilicen para fines comerciales, entre otros.

Incluso puede suceder que, años después, esas aplicaciones cambien de propietario o presenten vulnerabilidades, dejando toda tu información expuesta. Podrían usar esos datos para ejecutar ataques de Phishing más específicos, robando contraseñas o realizando otros tipos de ataques. Por lo tanto, existe un riesgo de que tu información se exponga en la red.

Revisar y eliminar permisos otorgados

Es fundamental que revises qué aplicaciones tienen permisos otorgados y, si ya no las utilizas, proceder a eliminarlas. El proceso es sencillo y puedes hacerlo en cualquier momento. Esto contribuirá a mejorar tu privacidad y a reducir el riesgo de que tus datos personales caigan en manos inadecuadas.

Lo primero que debes hacer es acceder a tu cuenta de Google. Una vez dentro, en la parte izquierda del menú, encontrarás la sección de Datos y privacidad. Ese es el apartado que necesitas. Allí podrás ver los permisos que has concedido a otras aplicaciones.

Desplázate hasta la sección de Datos de aplicaciones y servicios que utilizas. Allí se mostrarán todos. Encontrarás los de Google, como YouTube, Gmail o Maps, y, más abajo, los servicios de terceros. Esto es lo que nos interesa para poder gestionar las aplicaciones a las que hemos dado acceso. Haz clic en esa opción.

Una vez dentro, podrás ver todos los servicios de terceros a los que has otorgado permisos para acceder a la información de tu cuenta de Google. Podrías ver redes sociales, como X, así como tiendas online y aplicaciones web que utilices, etc. Es probable que encuentres algunas que ya no uses regularmente y prefieras eliminar.

Al hacer clic en cualquiera de ellas, verás un mensaje similar al que mostramos a continuación. Google te informará que, al iniciar sesión con Google, estás compartiendo información sensible con esa plataforma, como en el caso de X, por ejemplo.

En la parte inferior, encontrarás un botón que dice “Eliminar todas las conexiones que tienes con X”. Simplemente debes hacer clic ahí y desvincularás ese servicio de tu cuenta de Google.

Aunque nos hemos centrado en Google, dado que es la plataforma más utilizada y donde es común tener servicios vinculados, también podrías realizar una revisión similar en Facebook, por ejemplo.